Desde las empinadas cascadas del Cajón del Maipo hasta las reñidas competencias internacionales, el deportista y guía Elías Cantillana está marcando un camino para una disciplina poco conocida en Chile: el canyoning o barranquismo. Con un reciente tercer lugar en un prestigioso festival en Colombia, este cajonino busca no solo posicionar este deporte, sino también profesionalizarlo y, con ello, poner en valor el tesoro natural que es su hogar y lugar de trabajo.
Texto: Benjamín Bustos. / Fotos: Elías Cantillana
Un diamante en bruto: la visión del Cajón del Maipo
Para Elías Cantillana, de 32 años y CEO de Rupucura Outdoor, el Cajón del Maipo es más que su lugar de residencia: es su «patio», un «diamante en bruto». Con diez años de experiencia en la exploración de cañones y quebradas, ha visto de cerca la necesidad de proteger este entorno. «Creo que si nos unimos en esta visión… de preservar, de conservar nuestro territorio, yo creo que podemos hacer más de lo que pensamos», afirma. Su visión va más allá de su disciplina, abarcando diversas áreas de turismo que, según él, podrían unirse para generar un impacto mayor en la zona.
¿Qué es el canyoning?
Si bien el término puede sonar ajeno a muchos, el canyoning es la exploración de cañones y quebradas, y no solo el descenso de cascadas como algunos creen. Elías lo describe como una disciplina que combina caminatas, natación, saltos, y el uso de cuerdas. En el Cajón del Maipo, donde el agua no es tan abundante como en otras zonas, se enfoca en el descenso de cañones muchas veces secos. Es un deporte que, a diferencia de otros países, en Chile aún está en pañales y su regulación es escasa. Es por eso que Cantillana, a través de su empresa y su rol como fundador de CanyoningChile.cl, trabaja para darlo a conocer.

Desde Colombia con un tercer lugar
A fines de julio, Elías viajó a Colombia para participar en la tercera edición del “El Chispero Canyoning Fest”, uno de los eventos más importantes de Latinoamérica. En la competencia, que midió tanto la velocidad como la técnica, superó a deportistas de países como México, Brasil, Puerto Rico, y Costa Rica, entre otros, para obtener un notable tercer lugar. Su tiempo fue de 4 minutos y 31 segundos, a tan solo 4 segundos del segundo lugar y 18 del primero.
A pesar del gran desgaste físico tras días de capacitaciones y recorridos por cañones, un colega lo animó a competir. «vivamos la experiencia, esto no lo vamos a volver a hacer quizás hasta cuando», le dijo. Su logro no solo es personal, sino que lo considera una victoria para Chile y para la disciplina del canyoning. «Me siento feliz de poder traer a Chile un tercer lugar que sin duda es importante para el territorio, pero también para esta hermosa disciplina del Canyoning o barranquismo que está tomando recién impulso», expresó.
Profesionalización y futuro
Uno de los mayores anhelos de Elías es traer al país un centro de formación con certificación internacional, para que los guías y operadores locales puedan capacitarse sin tener que viajar al extranjero. Según él, «los que pueden vivir del turismo son muy pocos» y no tienen la capacidad para costear un viaje fuera del país.
Además, su compromiso lo ha llevado a un punto crítico: la seguridad. Elías señala que muchos cañones del Cajón del Maipo no están equipados correctamente, pues utilizan anclajes y chapas diseñadas para escalada y no para barranquismo, lo que representa un riesgo. Por eso, una de sus metas es reequipar las rutas para garantizar que sean seguras tanto para el deporte como para los operadores turísticos.
Con su trabajo y su pasión, Elías Cantillana no solo pone el nombre de Chile y del Cajón del Maipo en el mapa internacional del canyoning, sino que también se proyecta como un actor clave para el desarrollo profesional y seguro del turismo de aventura en el corazón de la cordillera.
